Inspección y Bromatología: El curro de la carne.-

Es notoria la proliferación de carnicerías en esta ciudad de Puerto Madryn.
De un día par otro «hacen» el lugar, lo equipan, lo proveen y abren.
El tema de la carne debe ser de uno de los mas sensibles en la cultura, o atavismos, del común de la gente en al Argentina. Es muy difícil resistirnos al aroma de un asado, de un churrasco, de una milanesa. Es más, la carne de consumo, a los humanos a partir de cierta edad, nos tira mas que ciertas vellosidades. A partir de esta «necesidad» fisiológica es que se han montado y lanzado muchas, muchísimas, carnicerías.
Hay varias, la mayoría, que venden productos de calidad variable entre lo deplorable y lo peligroso. Son productos que en otros lugares descartan, por no ser aptos para consumo humano.
Es palpable entonces que hay un negocio muy interesante en este tema de la carne; deben ser muy importante las diferencias económicas, y por sobre todo la reducción del descarte gracias a la «resurrección de la carne» mediante el método de lavado con cloro y al re-pigmentado con otros químicos.
Personalmente he detectado, gracias a mi bolsillo y mi salud, que por lo menos diez carnicerías venden productos carneos en condiciones lamentables, o mejor dicho: carne resucitada.
Si yo, pobre y elemental consumidor, después de haber churrasqueado una regular chuleta, que tengo que salir corriendo al baño, por la diarrea que repentinamente me produjo esa carne, entonces que pasa con el ente que tiene o tendría que encargarse de las buenas condiciones bromatológicas de los alimentos perecederos.
Hay en el municipio una tal Sra. Irene QUIROGA, que me parece ser la persona que está a cargo de las inspecciones a los comercios que venden productos alimenticios para consumo humano. ¿Sabrá ella de la existencia de carnicerías, por ejemplo de la que está en P. Derbes y Fragata Hércules, en la que es evidente la recuperación de la carne en descomposición mediante métodos químicos?. Tengo entendido que el Area de Bromatología tiene todos los elementos de laboratorio como para hacer las verificaciones correspondientes; salvo que formen parte del curro y que por ello tengan su buen retorno o comisión.-